Reiki refiere a la energía universal (rei) que establece la armonía con la energía personal o fuerza vital (ki). Es la energía del Amor, de la sanación; una energía de alta vibración que a través de un canal (reikista) que la recibe, se dirige a la persona o consultante directamente donde la necesita. Es así como numerosas observaciones experimentales han demostrado que una vez que ha entrado la energía al cuerpo, ésta se dirige espontáneamente al lugar que hace falta, por lo que la terapia pretende ayudar y favorecer el proceso de curación que está en curso.
Al igual que otras terapias vibracionales y energéticas, Reiki actúa en la sanación de las causas de las enfermedades -bloqueos o desarmonías-, sanando y liberando toda baja vibración, recuperando la salud y el bienestar. Por su parte, al considerarse una terapia complementaria, no reemplaza los tratamientos alópatas, funcionando muy bien en paralelo o como prevención de enfermedades y equilibrio energético.
¿Cómo funciona?
Se canaliza la energía universal con el simple hecho de usar la imposición de manos sobre los centros energéticos (chakras), o en la parte del cuerpo donde haya un bloqueo, dolor o donde se requiera, aplicando tratamiento en cualquier situación y para cualquier dolencia o malestar tanto física, mental y emocional. Al armonizar el campo energético en sincronía con el universo, se adquiere sanación, equilibrio y paz.
Los procesos de sanación del Reiki actúan sobre todos los planos del individuo, sin limitarse al aspecto físico: se introduce una armonización de todos los desequilibrios pasados y presentes, viendo aparecer temas olvidados o rechazados, dificultades emocionales que se creían resueltas. Se trata de una verdadera acción de desintoxicación; todas las toxinas físicas y psíquicas vuelven a circular para ser definitivamente expulsadas. Por tanto, Reiki permite desencadenar un proceso global de curación natural, lo cual significa que se reparan aspectos físicos y emocionales, se alinea el Ser con el sentido más profundo de la existencia, aprendiendo a aceptar e interpretar los sucesos que ocurren.

Beneficios Reiki
- Armoniza el organismo. Muy útil como prevención de enfermedades, positividad y clarificación.
- Ayuda a sanar traumas, dolores, represiones emocionales acontecidos, liberando los bloqueos o sobrecargas de energía, las que pueden incurrir en enfermedades o desarmonías mentales.
- Libera del miedo, la ira, los enojos contenidos y todas aquellas emociones de baja vibración que generan sufrimiento, apego al pasado y dolor.
- Eliminar la angustia, el estrés, la ansiedad. Superar la depresión.
- Orienta a observar, reconocer y superar, desde el amor, los obstáculos o limitaciones personales.
- Entrega calma mental y enfoque en el presente.
- Mejorar la calidad de vida ya que uno se siente más enérgico, feliz y pleno.
- Aliviar dolencias físicas producto de manifestaciones psicosomáticas –dolores de cabeza, articulaciones, tensión muscular, etc-.
- Ayuda a limpiar, sanar y perdonar situaciones pasadas, presentes y ‘programar’ situaciones futuras.
- Reiki a Distancia: Consiste en enviar sanación y energía a personas que necesiten Reiki y no estén físicamente en la sesión. Además se utiliza Reiki para protección, para sanar situaciones del pasado o enviar luz al futuro. Como Reiki es energía, no existen distancias, tiempo, espacio, límites, obstáculos, ni prohibiciones, siempre y cuando se respete el libre albedrío de la persona o incluso la aprobación de los maestros o guías espirituales.
